• Inicio
  • Acerca de
  • Contactar
  • Archivos
  • Concepto

¿Por qué en España el desempleo estructural es tan alto?

https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEij3qip63PLRuPExDeFXbPeXTTYq1p4S38gNulXdPnLe4FQJKggrpryd5plgE_TNd40YcKJ1BClcF4a3kb4Ug6IljmpSYZ7JSYZqL_fD1Obg2qNvd7m5ThziKmdNnPZA4zC8jhE4lDkMQTF/s400/elroto.jpg 
Leyendo este artículo del economista Santiago Niño Becerra, en respuesta a un lector, queda claro por qué en España existe un alto desempleo esctructural desde hace años... dice así:
“España siempre ha tenido una tasa de desempleo estructural muy elevada que durante el franquismo se camufló con subempleos escandalosos y con emigración. La razón última del alto desempleo estructural español es múltiple y muy vieja: se remonta a los siglos XIII y XIV.
Por el Tratado de Almizra la Corona de Aragón, con un espíritu fundamentalmente burgués y comercial, vio frenado su avance hacia el Sur en Alicante; por otra parte, la guerra primera guerra civil castellana la ganó el pretendiente apoyado por la nobleza absentista y terrateniente y la perdió quien estaba apoyado por la burguesía. Eso determinó el triunfo de un modo de hacer no económico y no productivo que fue el que descubrió América.
Si añade que en el siglo XV fue arrasada en Andalucía  una agricultura de vanguardia y que se propició el triunfo de una política de ganadería extensiva, exportadora y sin mejoras que dificultó el desarrollo agrícola y que colapsó el desarrollo forestal;  la Contrarreforma que España lideró en el siglo XVI y que llevó a gastar en batallas por Europa ingentes cantidades de plata traída de América en un momento en que nadie tenía plata; y las aventuras en Flandes del XVII, a lo que se llega es a que cuando a principios del s. XIX que es cuando comienza la industrialización, España sea un desierto gobernado por aristócratas enganchados a una monarquía inoperante y decadente y donde el caciquismo y el clericalismo fundamentalista son las correeras de transmisión de ese poder.
Se puede imaginar cómo podría ser el mercado de trabajo en Écija, por ejemplo, hacia 1860 y las posibilidades que en Écija tendría la población activa y susceptible de serlo, una situación radicalmente diferente a la que se podía encontrar en Sheffield, Lile o Augsburg. (Y no estoy hablando de explotación: en esa época se explotaba a la clase obrera en todas partes … en las que la industrialización era pujante; en las que no se las sumía en la servidumbre).
Lo que vino después ya es conocido. Falta de un modelo industrial que absorbiera factor trabajo y con un espíritu muy laminado por una Iglesia inmovilista, la mano de obra española, en plena Era Industrial y salvo en muy concretos lugares, empezó a llevar una existencia  precaria, subremunerada y subempleada, y donde el tratamiento de ‘señorito’ y ‘amo’ se impusieron por mayoría a los de ‘dueño’ y ‘fabricante’.

Publicado por #Froilán# 6/Noviembre/2012

Enter your email address:

Delivered by FeedBurner